- La primer Mac mini fue presentado en 2005 como una versión más pequeña y económica de las computadoras de escritorio de Apple.

Hoy, 14 años después, esta computadora aún cumple con ambas características, lo que la convierte en una gran opción tanto para quienes tienen poco espacio o un presupuesto reducido, como para aquellos usuarios de PC que quieren probar con los equipos de la firma de la manzana sin invertir demasiado.

Su modelo más reciente fue lanzado en 2018. En Expansión, lo primero que notamos al recibir el equipo es que su diseño mantiene el de sus antecesores. Pero esto no es malo: es minimalista, fácil de transportar, apilar o almacenar. En donde sí encontramos un cambio es en la parte trasera y en el interior del dispositivo.

En esta ocasión tenemos cuatro puertos Thunderbolt 3 USB-C —para cargar dispositivos o conectar pantallas externas y periféricos de alto rendimiento— en lugar de uno, un pro, pero sólo dos puertos USB, la mitad que en el antecesor del aparato, un contra a nuestro parecer.

Esto último puede convertirse en un dolor de cabeza, sobre todo para aquellos que cambian de PC a Mac por primera vez y no cuentan con un Magic Mouse o Magic Keyboard de Apple, utilizan estos puertos para cargar otros gadgets o necesitan o están acostumbrados a compartir archivos por esta vía.

Hablando de ratones y teclados, algo que personalmente me hizo entrar en conflicto es el color del Mac mini 2018: gris espacial. Aunque es estético y elegante, si ya cuentas con un Magic Mouse o Magic Keyboard de otro color —y eres como yo—, al usar este equipo te entrará la urgencia de cambiar estos por nuevos en gris espacial.En la caja, como siempre, Apple sólo incluye la Mac mini y el cable de corriente.

Para terminar con la parte trasera del equipo, contamos también con un puerto Ethernet que puede configurarse hasta Ethernet de 10 Gb, uno HDMI y, aún, una entrada de 3.5 mm para los audífonos que, probablemente, desaparecerá en próximas computadoras Apple.Respecto al interior, la firma de la manzana decidió ‘refrescar’ su sistema de enfriamiento con un ventilador más grande, menos ruidoso y con salidas más amplias que, asegura, duplican la circulación del aire.

El Mac Mini 2018 está disponible en dos versiones: Intel Core i3 de cuatro núcleos y 3.6 GHz o Intel Core i5 de seis núcleos y 3.0 GHz —ambas pueden escalar a un Intel Core i7 de seis núcleos y 3.2 GHz—. Nosotros probamos la versión más básica, con 8 GB de memoria DDR4 de 2666 MHz y almacenamiento SSD de 128 GB.

En Expansión pudimos utilizar el equipo para nuestro quehacer diario: hacer investigación armar textos, contestar correos electrónicos, atender videollamadas, editar fotografías y audios, entre otras actividades.

En ningún momento, ni con una decena de pestañas abiertas en el buscador, ni utilizando programas como GarageBand, tuvimos problemas con la Mac mini, su rendimiento y velocidad son bastante buenos y no registramos sobrecalentamiento.

Ahora lo más importante: el precio. La Mac mini 2018 en su versión más básica cuesta 19,499 pesos, mientras que si decides adquirir la del procesador Intel Core i5 de seis núcleos y 3.0 GHz con Turbo Boost de hasta 4.1 GHZ y almacenamiento de 256 GB, puedes hacerlo por 26,999 pesos.

Pero además, si la compras en apple.com puedes personalizar el aparato con tus prefetencias de memoria, almacenamiento, Ethernet y hasta software preinstalado por unos miles de pesos más.

Te recomendamos definir para qué quieres la Mac mini y, con base en ello, valorar si vale la pena invertir en alguna de estas opciones, ya que cada una ofrece diferentes ventajas —o no— para cada usuario.